El cerebro es un extraordinario órgano del ser humano, que aunque sorprendente tiene limitaciones, una de las funciones mas importantes del cerebro humano es evaluar información; la cual es captada a través de los sentidos
Lamentablemente estos no son totalmente confiables, por ello muchas veces debemos ayudarnos por instrumentos, por ejemplo los pilotos lo hacen constantemente ya que pudieran estar volando de cabeza en medio de la noche y lo que consideran arriba en realidad sea abajo entonces las consecuencias podrían ser terribles.
Yo creo que Dios considerando estas temibles limitaciones nos hablo del juzgar a los demás, es decir evaluar información con el cerebro y no con el espíritu
En el capitulo 6 de Mateo el Señor nos habla de no hacer nuestra justicia delante de los hombres, de no orar como los hipócritas , del peligro de la palabrería y luego nos enseña como deber ser nuestra oración de perdonar para ser perdonados .. Y luego dice
NO juzguéis, para que no seáis juzgados.
Porque con el juicio con que juzgáis, seréis juzgados; y con la medida con que medís, os volverán á medir Mateo 7:1-2
Agitar el martillo en el estrado y dictar la sentencia es uno de los ejercicios a los cuales el ser humano es mas proclive, “aquel es un hipócrita” “un fariseo”… emitir un juicio sobre una persona es muy sencillo y a menudo se convierte en un prejuicio, puesto que no hemos oído todas las evidencias y no conocemos la dos versiones. Nuestra mente es tan limitada para estos aspectos.
Creo que hay dos cosas que al menos se deben considerar:
1. Es posible que haya algo mas allá de lo que mis ojos pueden ver, algo que yo no he considerado, algo que esta lejos de mi alcance informativo, es sencillo mal entender los datos, el agua es buena y beberla es bueno también; eso es verdad: sin embargo hay algo mas allá, porque no todas las aguas son buenas pues podrían estar contaminadas.
Mientras mas posibilidades podemos evaluar, mas temeremos hacer un juicio, siempre hay cosas que no sabemos, situaciones que no hemos conocido, no todo puede ser evaluado por la experiencia, cada situación puede convertirse en una única situación; la mente quiere recorrer el camino fácil, el que ya se formo por la experiencia.
El pastorcillo mentiroso por ejemplo, dijo la verdad al final; pero nadie le creyó porque evaluaron según la experiencia, es como el error del ateo que niega a Dios porque nunca lo ha visto y siguiendo esta lógica debería dejar de creer en que el planeta no esta sostenido por “nada” en el espacio, o como dicen los colombianos: “el que nunca ha tenido gallinas piensa que las patas son pechugas”.
Se dice que cuando era niño Einstein se quedaba callado cuando le preguntaban en el colegio y al final el pequeño no sabio responder; a lo cual el profesor decía: “eres un niño estúpido”
El niño Albert no sabia responder porque había creado un laboratorio en su mente con un sin fin de posibilidades a la pregunta del profesor, las escasa información dada por el profesor y las múltiples posibilidades hacían el silencio en Albert
¿Me pregunto como se sentiría ese profesor cuando Einstein publico la teoría de la relatividad?
Pro 14:3 En la boca del necio está la vara de la soberbia: Mas los labios de los sabios los guardarán.
Aun como cristianos cometemos tantas veces el error de evaluar las cosas con nuestros pequeños datos:
Calificar a las personas sin siquiera saber sus historias o identificarnos con ellas, es demasiado fácil.
Todos saben que la PC a veces reacciona de un modo incomprensible, ni los mismos expertos en PC saben la causa, así me sucedió algunas veces cuando visitaba a mi primo, mi hijo siempre quería jugar con la PC; al final temeroso que el ímpetu de mi hijo malograra algo que no es mío lo supervisaba hasta que el terminara; sin embargo dada esas “casualidades” casi siempre en la próxima visita me enteraba que la PC se había malogrado luego que nos fuimos; y claro mi hijo era el culpable implícito a pesar que yo estaba seguro que nosotros no habíamos sido los causantes .
Años después este familiar vino a visitarme varias veces y me pidió prestada la PC, un día regrese a casa y la PC tenia un Paswoard: ¿que hice yo?
De inmediato pensé que el culpable era mi primo. ¡Ahora tendré que desarmar la PC y hacer corte de pila! Pensé, etc. etc.; pero Dios es bueno y me hablo despacito en mis recuerdos.
Me calme y no le dije nada a mi primo deje a un lado mis ganas de sermonearlo y sacudirlo hasta que se acuerde el psw, luego investigando en la PC descubrí que el no había tenido nada que ver con el problema, que era un tema muy aparte
El recuerdo de haber sido juzgado sin contemplar más posibilidades me ayudo a no herir a alguien; sin embargo no siempre es así y le ruego a Dios me ayude a tener esta voz en mi cabeza .
Emitir un juicio puede tener la mascara del “discernimiento divino” y aunque muchas veces debemos evaluar a las personas para determinadas circunstancias como dice Mathew Henry; me pregunto ¿cuanto de este juicio estaba basado en la palabra y cuanto esta basado en nuestra experiencia, o en nuestro parecer? La experiencia puede convertirse en prejuicio.
Que una persona hable muchas veces no quiere decir que quiere ganar protagonismo.
Que una persona pregunte no quiere decir que ya sabe la respuesta y quiere lucirse
De Jesús se decían muchas cosas; pero los que le acusaban no podían ver más allá, tal vez porque tampoco tenían el interés de saber si aquellas acusaciones eran reales.
Antes de emitir un juicio hay que considerar que puede que haya otra alternativa.
2. Lo segundo es : ¿serias tan duro contigo o con los tuyos al emitir un juicio?,¿le dirías a alguien ladrón si fuera tu hermano, o tu padre o tu amigo?,¿Que tal si fuera tu hijo? ¿Gritarías por las calles adultera a tu amada madre?.
La vida puede ponernos en circunstancias para taparnos la boca antes de ser implacables jueces, de pronto condenas a muchos porque se prestan dinero y la vida te pone en una situación en la que tienes que prestarte dinero, de pronto condenas al que miente y luego tu eres el que miente, la mujer adultera es condenada rápidamente y todos hombres y mujeres están dispuestos a tirarle piedras; pero bendito sea Dios que el no es así ya que el puede ver mucho mas allá de lo que aun nosotros mismos vemos en nuestro interior . Recordemos que es sencillo para Dios ponernos en el estrado de los acusados.
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